El fallo de la Corte Internacional de Justicia de La Haya de este lunes, que agrandó el espacio marítimo nicaragüense y ratificó la soberanía colombiana de las islas y cayos del archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, ha generado múltiples reacciones en ambos países.

El fallo de la corte es inapelable y de obligatorio cumplimiento.

Para el abogado nicaragüense experto en derecho internacional, Mauricio Herdocia, ninguno pierde. Según él, Colombia y Nicaragua han obtenido parte importante de sus pretensiones, independientemente de que Nicaragua haya obtenido más territorio.

"Se trata de un fallo totalmente ajustado a los principios de equidad y proporcionalidad", asegura.

Herdocia afirmó a BBC Mundo que Nicaragua está muy satisfecha con lo que ha obtenido porque "la pretensión de Colombia era totalmente extrema: encerrar al país en el meridiano 82, privarla de su proyección natural de zona económica exclusiva y plataforma continental".

"Aquí de lo que se trataba era de que un estado no puede imponerle a otro un límite frente a su costa y dejarlo con un balneario. Nicaragua ahora recupera una inmensa proporción de un territorio que siempre fue suyo bajo el derecho internacional, la historia y la geografía", asegura.

Por su parte, el abogado y politólogo colombiano Walter Arévalo señaló a BBC Mundo que lo que se esperaba era más bien una decisión unitaria del archipiélago.

"Los colombianos decíamos 'el archipiélago es todo (islas, islotes, cayos)'. Sin embargo, según la decisión de la corte, el archipiélago está conformado por islas grandes. Otros cayos más pequeños, no, en los que el espacio colombiano solo se proyecta 12 millas alrededor. El resto del mar pertenecerá a quien tenga la plataforma continental, en este caso, Nicaragua", dice.

En contexto

La decisión pone fin a más de una década de controversia jurídica que diplomática y políticamente empezó en 1980, cuando Nicaragua desconoció el Tratado Esguerra-Bárcenas de 1928-1930, que estableció los límites marítimos entre ambas naciones.

El propio Juan Manuel Santos señaló en el comunicado de la presidencia que la decisión de La Haya "no es compatible con la concepción geográfica de lo que es un archipiélago".