La canciller María Ángela Holguín les pide a los expresidentes y dirigentes políticos “no mezclar los intereses de la Nación con los intereses políticos”
La canciller María Ángela Holguín les pide a los expresidentes y dirigentes políticos “no mezclar los intereses de la Nación con los intereses políticos” y advirtió que las diferencias “debilitan nuestra posición hacia afuera”.
En el siguiente reportaje asegura que el fallo de la Corte de La haya sobre las diferencias con Nicaragua “no será ejecutado” mientras no se garanticen los derechos históricos de los sanandresanos, que la Corte desconoció. La canciller detalla el estado actual del asunto y las gestiones que adelanta el Gobierno.
Las relaciones internacionales de Colombia han sido siempre una política de Estado bajo todos los gobiernos. ¿Lo sigue siendo hoy?
Sí. Siguen siendo una política de Estado y, conforme a la Constitución, están en cabeza del Presidente. La defensa del interés nacional demanda que el Estado conserve una línea de acción inalterada. Estamos convencidos de la importancia de continuar construyendo consensos y preservar los asuntos de interés nacional de los vaivenes de la política.
¿Qué tanto daño le hace a la posición colombiana en temas internacionales la falta de unanimidad por parte de sus dirigentes políticos?
Las diferencias debilitan nuestra posición hacia afuera. Esperemos que se sigan preservando los consensos y mostremos unidad y fortaleza hacia el exterior.
¿A qué adjudica que haya desaparecido la posición de unanimidad interna?
No ha desaparecido. Las reacciones que vemos generadas por la enorme frustración frente al fallo de la Corte Internacional de Justicia no las entiendo como una ruptura del consenso. Este episodio no nos puede sacar de esa tradición. El Gobierno está mirando hacia adelante. Enfocarnos en buscar culpables no ayuda en nada a los intereses nacionales por los cuales tenemos que seguir luchando.
¿Hasta dónde los vaivenes de la política nacional deben afectar la unión que requieren las posiciones internacionales de Colombia?
Yo confío en que los temas internacionales no hagan parte del debate político interno y que nadie pretenda sacar réditos políticos del fallo de la Corte, que fue tan desafortunado para el país y para los habitantes del archipiélago. En ningún momento el Gobierno ha pensado en este tema de una manera distinta a preservar los derechos históricos y a recurrir a todo lo que esté en sus manos para hacer frente a esa decisión. Como pidió el presidente Santos con respecto a las Fuerzas Armadas, habría que solicitar lo mismo con respecto a nuestras posiciones internacionales. No mezclar los intereses de la Nación con los intereses políticos. Hay que seguir buscando y seguir trabajando por encontrar consensos frente a los temas fundamentales de política exterior que implican intereses nacionales…
Pero el consenso nacional no existe, porque hay críticas del expresidente Uribe y críticas del expresidente Pastrana...
¿Frente al fallo, quiere decir? En el caso del expresidente Pastrana, su molestia, tengo entendido, ocurrió por la posibilidad de que se revelaran las actas de la Comisión Asesora. La misma Comisión decidió que las actas deben seguir siendo reservadas, y esa condición seguirá manteniéndose. En cuanto al presidente Uribe, él ha insistido en que el fallo se debe desacatar.
¿Qué tanto daño le hizo a Colombia no haber denunciado oportunamente el Pacto de Bogotá?
Es inútil especular si se hubiera podido hacer una cosa o la otra; la palabra “oportuno” en este caso es imposible de definir. Hubiéramos podido, cuando se firmó el Pacto de Bogotá en el año 48, haber dejado reserva excluyendo asuntos de delimitación. Aun, actuar tan pronto Nicaragua demandó a Honduras. Nunca sabremos qué tan avanzada tenía Nicaragua la demanda contra nosotros, pero sin lugar a dudas se hubiera podido denunciar.
Se sabe que bajo el gobierno del presidente Pastrana se perdió la opción de denunciar el Pacto de Bogotá y eso dio vía libre a la intervención del tribunal de La Haya. ¿No actuó el gobierno Pastrana como ha debido?
Esas especulaciones son inútiles.
¿Y con respecto a la posición del expresidente Uribe en el sentido de que Colombia debe desacatar el fallo…?
Es una posición que él ha asumido desde el principio. Lo ideal es discutir las diferencias que puede haber en lo que el Gobierno está haciendo y mirar adelante.
El expresidente Uribe pide desacatar el fallo; al contrario, el expresidente Pastrana dice que el fallo sí hay que aceptarlo. ¿En dónde está el Gobierno?
Hemos dicho: primero, es un fallo que no se puede implementar; estudiamos a fondo todas las repercusiones que ese fallo tiene para Colombia; segundo, vamos a ir a todas las instancias y a interponer los últimos recursos que tengamos para ver cómo podemos garantizar los derechos históricos de los sanandresanos.
¿Usted diría que no todo está perdido?
Yo creo que no todo está perdido… Pero, le aclaro: nosotros nunca hemos tenido soberanía, en el sentido jurídico estricto, sobre toda el área. Nunca. Soberanía propiamente dicha la seguimos teniendo sobre el mar territorial de todas las islas y cayos del archipiélago. Lo que la Corte le dio a Nicaragua fueron derechos económicos sobre una franja de mar. No soberanía. En cuanto a la pesca, recuerde que el mismo presidente Ortega dijo que él reconocía los derechos históricos de los pescadores de Colombia en el archipiélago. Y estos derechos históricos siguen manteniéndose. Eso es parte de los derechos fundamentales.
¿El fallo menciona o contempló esos derecho de pesca?
No.
¿Esa es la base del reclamo que Colombia está preparando?
Sí, entre otras. Desconoció unos derechos que creemos podemos hacer valer.
¿Pero no dice que la Corte no menciona los derechos de los pescadores?
Al no mencionarlos, los está desconociendo. Y tiene que primar el derecho de gentes y los derechos históricos.
¿Y lo seguirán haciendo en esa área?
Sí. Lo seguirán haciendo.
Mientras la Corte aclara…
También.
¿Es decir, el principio de que el fallo tiene vigencia inmediata, no se aplica?
Todos los fallos de la Corte Internacional de Justicia han tenido un promedio de siete años para ser implementados.
¿Es decir: no hay ni expresidentes culpables ni no culpables?
Buscar culpables no es el objetivo del Gobierno. Me parece que el país no saca nada con eso. Yo creo que absolutamente todos los presidentes actuaron de buena fe, contrataron los mejores abogados, hicieron lo que esos mejores abogados les dijeron que se hiciera.
¿Qué origen le atribuye a esa especie de sentimiento de culpa que admitió el presidente Pastrana al reaccionar tan airadamente frente a la opción de revelar las actas de la Asesora?
No lo sé.
¿Usted piensa consultar a los expresidentes Uribe y Pastrana, sobre la posición que Colombia finalmente asumirá ante la Corte?
Así lo hemos hecho y así lo seguiremos haciendo.
¿Ya le solicitó al expresidente Uribe mantener el consenso nacional sobre la política exterior de Colombia?
Yo tuve una conversación con el presidente Uribe. Como él no va a la Comisión Asesora, le pedí que me recibiera para comentarle lo que hemos hecho, en lo que se está trabajando con la firma inglesa. Creo que él tiene que estar enterado, y él tiene que participar. Un consenso de lo que el país debe hacer sería lo mejor…
¿Qué le dijo?
Se interesó, que es importante. Le comenté algunos asuntos que consideraba él debía conocer. Él insiste en que el fallo es un fallo antijurídico y que, por lo tanto, no se debe acatar. Yo seguiré consultando y contándole lo que estamos haciendo, así como a los demás expresidentes.
¿Fracasó en convencer al expresidente Uribe de que Colombia está obligada a acatar el fallo?
No iba con la intención de convencerlo de nada. Simplemente iba a contarle lo que ya le dije. Somos respetuosos del derecho internacional. Somos un país que vive dentro de una comunidad y como tal somos respetuosos de ella y somos respetuosos de un tribunal al que nos hemos sometido.
¿Pero usted mantuvo la posición de acatar?
Por ahora no se implementa.
¿Qué llama usted “implementar”?
Ejecutar. Seguimos buscando todos los recursos jurídicos para probarle a la Corte que desconoció derechos que estaban contemplados en las normas internacionales y desconoció pruebas contundentes que probaban nuestros derechos.
El expresidente Uribe no reconoce que los fallos del tribunal son de obligatorio acatamiento, así no satisfagan a las partes...
Él insiste en que no se acate, porque es un fallo antijurídico; ese es su argumento.
¿Ha hablado con el expresidente Pastrana?
Él estuvo en la Comisión Asesora el día del fallo de noviembre. Ahí su posición fue la de apoyar al Presidente. En esa ocasión, los presidentes Pastrana, Samper, Gaviria y Betancur apoyaron al Gobierno y dijeron que se estudiará el fallo a fondo, y eso es lo que hemos hecho.
La cumbre del Pacífico
Colombia será sede en mayo de la Cumbre de la Alianza Pacífico, que reúne a Colombia, Chile, México y Perú. ¿Qué acuerdos firmarán los presidentes de las cuatro naciones en el encuentro?
Colombia recibe la presidencia pro tempore de Chile. Los equipos técnicos vienen trabajando para lograr aterrizar lo que se quiere, que es una libre circulación de bienes, personas y servicios. Se formalizará la supresión de visas para actividades de turismo hasta por 180 días y el ofrecimiento de becas de estudio para pregrado, doctorado y docentes investigadores. México ya levantó su exigencia de visa. Estamos trabajando en la profundización de las relaciones comerciales vigentes entre los cuatro países.
El embajador en Venezuela
¿Colombia tiene definido quién va a ser el nuevo embajador en Venezuela?
No todavía… Esa nación está en pleno debate electoral. La relación con Venezuela es de actividad e incidentes en el día a día, y eso para los embajadores es pesado…
El agite empieza a las 6 de la mañana y termina a las 11 o 12 de la noche. Mire lo que han durado los últimos embajadores.
¿De qué manera el resultado de las elecciones en Venezuela puede afectarnos?
Si a Venezuela le va bien, a nosotros nos va bien; necesitamos estabilidad en Venezuela; esperamos que así sea.
Yamid Amat
Especial para EL TIEMPO